Nintendo está haciendo caja con un buen puñado de lanzamientos que ya vieron la luz en su anterior consola de salón (Wii U) ahora en Switch, lo cual tiene mucho sentido teniendo en cuenta que hay muchos jugadores que no disfrutaron de los mismos. Esto hace que haya también jugadores que sí que disfrutaron y que no tienen títulos originales de la compañía que llevarse a la boca, otra señal más para ver claramente que Nintendo ha aprendido lo que le faltaba por aprender en los últimos años.
A pesar de haberse anunciado como un juego totalmente original, el ciclo de desarrollo de la compañía no nos cuadra, máxime cuando su creador (Masahiro Sakurai) es muy perfeccionista y tarda bastante en quedar satisfecho con el producto. Esto nos hace pensar que si bien no nos encontraremos con un port del juego de Wii U, sí que se reutilizarán muchos de sus elementos para abaratar costes, y lo pensamos por los siguientes motivos:
* Pasar juegos de Wii U a Switch les ha resultado barato, rápido y rentable, lo que significa que ya saben cómo hacerlo. Utilizarán el mismo engine mejorado ligeramente para añadir más elementos, resolución y efectos aprovechando la mejora técnica de la consola.
* Muchos de los personajes que veremos en el juego solo tienen una versión (Mario) o ya tienen modelos hecho de otros juegos (Splatoon, Link). Esto significa que reutilizar gran parte de los recursos de la versión Wii U (algunos movimientos, escenarios y personajes por ejemplo).
Lo que realmente tienen que hacer es crear a algunos nuevos personajes y, más importante, hablar con compañías third parties para tomar prestados algunos otros que enriquezcan su universo (como Megaman), algo que a las compañías les interesa y mucho, máxime ahora con la fama de esta consola.
Lo que vamos a obtener es un juego mejor que el de Wii U, con muchos elementos rescatados y algunas variaciones. Obviamente, la anterior versión apareció en dos consolas, por lo que hacer un remake no hubiese gustado a mucha gente (a diferencia de Mario Kart 8, por ejemplo), y esto no es nada malo puesto que la mayoría de las compañías hacen lo mismo. Lo que realmente nos da a entender es que, de verdad, Nintendo está aprendiendo a usar sus recursos de forma mucho más óptima que antes.