Mario se merece lo mejor. Esto es algo indudable incluso para aquellos que odian a Nintendo, ya que gracias a este personaje muchos han descubierto los videojuegos incluso si no han jugado a ninguno de sus juegos o si jugastes antes a otros. Nintendo debería cuidar y mimar todos y cada uno de los productos que llevan su nombre, su imagen o alguno de sus personajes, y aunque casi siempre lo hace, a veces deja un poquito que desear. El 18 de septiembre, Nintendo Switch ve como un recopilatorio se pone a la venta con tres de los mejores juegos de la historia sin duda alguna, los tres de Mario y tres plataformas en 3D. Tengo tres cosas (una buena, una mala y una fatal) que decir sobre este recopilatorio, aunque ya se han dicho, y aún así no me resisto a ponerlas nuevamente por escrito.
Lo bueno, lo malo y lo fatal
Habría mucho que discutir de un recopilatorio como éste, y aunque se pueden analizar por su calidad, la forma de haber sido anunciado, cómo se han hecho, o lo que se debería haber hecho, voy a intentar englobarlo todo en tres puntos básicos.
Lo bueno - Super Mario 3D All Star es un magnífico recopilatorio que tiene, como digo, tres excelentes juegos. El primero (Super Mario 64) que estableció las bases de muchos juegos de mundo abierto en 3D sin llegar a serlo (de mundo abierto), así como a otros muchos juegos y géneros, en especial los plataformas. El segundo (Super Mario Sunshine) en el que Nintendo demostró muchas cosas, como que sabía escuchar a su público añadiendo elementos a favor del medioambiente y no tanto el de tener que liberar a la princesa que se mete en más problemas del mundo, así como que sabía hacer juegos realmente difíciles con algunas de las misiones más complejas que se hayan hecho jamás en un videojuego. El tercero (Super Mario Galaxy) con el que nos demostraba que todavía se pueden hacer muchas cosas originales en videojuegos o que la potencia de una consola no es para nada el elemento más importante a la hora de hacer buenos juegos, sino también que aún se puede innovar en mecánicas de juego ya conocidas presentando un plataformas realmente perfecto.
Lo malo - Al salir a la luz que el recopilatorio tira de emulación en lugar de haber hecho versiones propiamente dichas se te queda un regusto amargo. No considero que esto esté mal ni mucho menos, ya que una remasterización (a pesar de que muchos aseguran que es un port y no lo es) puede serlo del juego original corriendo en una emulación que los hace verse mejor, y en este caso lo consigue aumentando la tasa de frames, la resolución, y el ancho de pantalla a 16:9 en dos de sus tres juegos cuyo formato original era 4:3. Sin embargo y por este motivo es un recopilatorio descuidado, hecho con pocas ganas y con muy poco cariño a un personaje que ha dado a Nintendo casi todo lo que es a día de hoy, y que se merece mucho más. Vale que han tenido que hacer un emulador para hacer correr el juego e incluso que se vea mejor que las versiones originales, y también vale que están en pleno derecho porque a pesar de ser roms son suyas, tienen los derechos y por tanto pueden hacer lo que quieran con ellas. Sin embargo, y como ya dijimos en una opinión anterior, el treinta y cinco aniversario del personaje de los videojuegos más conocido de todos los tiempos merecía algún remake bien hecho, así como buenas remasterizaciones con extras suficientes para que merezca la pena ser jugado incluso por los que ya lo hemos hecho. Meter tres roms en un juego, emularlas, no meter extras (la banda sonora no es suficiente para que compense su compra a los que ya hemos jugado), cobrarnos precio de juego nuevo, y encima hacerlo por tiempo limitado para que los especuladores hagan su agosto cuando deje de estar a la venta de forma oficial (en marzo de 2021) aumentando la compra compulsiva durante los primeros meses no es el camino que una compañía como esta debería seguir.
Lo fatal: Aquí hay un detalle que me llama mucho la atención, y es cómo algunos defensores de la piratería (que es ilegal, no lo olvidemos) están aprovechando para mezclar conceptos y decir que si Nintendo puede utilizar roms en sus juegos cualquiera debería poder hacerlo. Esto casi no debería ser explicado por ser de lógica y de sentido común, pero parece que no abunda demasiado. Una compañía que tiene los derechos de uso de sus juegos, personajes, marcas, nombres, música, colores, y cualquier otro elemento que esté registrado puede hacer con ellos lo que les dé la gana, y por ello usar incluso sus propias roms y emularlas en nuevos juegos siendo totalmente lícito y legal porque son suyos, a diferencia de un usuario particular que no ha pagado por usar nada, ni por rippear roms, BluRay, DVDs o CDs, y usarlos de forma ilícita incluso si no tiene intención de lucrarse con ello. Está mal que la propia Nintendo lo haga, eso es indudable, pero desde luego está en su pleno derecho, por lo que el debate que se ha generado en la comunidad, especialmente en algunas redes sociales, sorprende cuando ves que algunos acusan a la compañía de doble rasero cuando cierran páginas de emulación y/o van detrás de esas compañías que sí que se lucran con cartuchos o aparatos para poder piratear sus consolas. Se debería poder resumir diciendo que ellos están en pleno derecho de hacer lo que quieran con sus productos mientras que los demás no pueden hacer nada con ellos, ni lucrarse, ni coparlos, ni aprovecharse de su trabajo aunque hayan pasado muchos años usando formas, personajes, músicas, patentes, marcas...
Nintendo y las ROMs
Yo he sido uno de los millones de afortunados que han jugado a los tres juegos originales en sus respectivas consolas, y aunque maravillado por ellos no considero que merezca la pena comprarse una recopilación por jugarlos otra vez. Es una opinión personal basada principalmente en que ya disfruté en su momento de ellos y en el mercado hay tantísima demanda de juegos buenos que me encantaría poder disfrutar de ellos y descubrir otros que aún no conozco, en lugar de volver a jugar a lo mismo. Sin embargo se que también hay muchos jugadores que desean volver a jugar a estos tres juegos y a cientos de miles de otros juegos a los que ya han jugado, y éste es el motivo por el que hay tanta demanda de remasterizaciones y remakes de juegos clásicos y no tan clásicos.
Por ello, esta recopilación me parece fantástica incluso utilizando emulación que hace que se vean mejor que los originales y que da acceso a millones de jugadores que no han podido jugar o que pudieron pero no lo hicieron, haciéndolo ahora en portátil. En el mismo caso están todos esos juegos que millones de jugadores están disfrutando ahora en Switch y que eran de otros hardware como NES o Super Nintendo. Ahora mismo, la política de Nintendo es ofrecer con cuentagotas algunos juegos clásicos dentro de la suscripción al servicio Nintendo Switch Online, por la que están cobrando casi cuatro euros al mes por unos cuantos juegos antiguos. En Wii U era aún peor, ya que eran capaces de cobrar más de diez euros por juegos de Nintendo 64 y algo menos por los de Super Nintendo, lo que haciendo cuentas nos sale a casi de cuarenta euros por tres juegos de N64.
Si nos ponemos en este caso anterior, sesenta euros por tres juegos más actuales emulados y que tendremos de por vida al comprarlos y no por servicio de suscripción no me parece tan descabellado, y sigue muy de cerca sus principios y los que todos sus fans han seguido y acatado durante los últimos años. Repito que creo que el trato que se le ha dado a los juegos debería haber sido otro, con mucho más mimo y cuidado y, sobre todo, pensando en sus fans más leales, ofreciendo mejoras (me da igual si en emulación o no) en las texturas, añadidos, alguna fase descartada por espacio o tiempo, o cualquier otra cosa que compensara su compra a los que ya hemos jugado.
El resumen podría ser que Super Mario 3D All-Stars no es malo, pero quizás no es el camino para agradar a sus fans y hacer nuevos, porque no olvidemos que muchos de los que aún no han jugado o tienen sus consolas se dejan influenciar por sus amigos y gente que ve vídeos en Youtube y redes sociales.
