En los tacones de Ada... con jugabilidad renovada
Al igual que ocurrió en la versión para PS2 de
Resident Evil 4,
Separate Ways es un nuevo modo de juego en el que la despiadada Ada Wong se convierte en la protagonista absoluta, siguiendo su propia historia y mostrándonos qué pasa con ella entre cada uno de sus cruces con
Leon.
Lo mejor del asunto es que
Ada no es un simple clon del ex-policía, tiene sus habilidades propias, destacando un versátil gancho que
nos permitirá tanto subirnos a determinadas partes de algunos escenarios - huyendo de los enemigos si nos vemos acorralados - como rematar a monstruos heridos a distancia, compensando así la mayor fragilidad del personaje. Además,
Ada es una experta en sigilo, y el juego presenta ahora más secciones en las que esta mecánica (tratada muy sutilmente en el juego principal) tiene mucho más peso e importancia, ya que el personaje es absolutamente letal cuando coge a los
ganados por sorpresa... Y por si fuera poco hay una tercera mecánica extra, una para
seguir el rastro de determinadas presas que también nos ha parecido un buen añadido, aunque es cierto que está menos desarrollada que las otras dos (algo influido también por la linealidad de los escenarios).
Si mezclamos estas novedades con el excelente
gameplay de
RE4 Remake: tiroteos, parry con el cuchillo, uso de elementos del escenario... El resultado final es un modo extra que refuerza la aventura principal y la hace todavía más redonda, divertida y adictiva.
Completando los huecos
Al igual que en el juego original, esta aventura
paralela protagonizada por
Ada no se limita a revisitar los escenarios y proponernos los mismos retos, todo lo contrario. Esta mercenaria tiene su propia misión (inicialmente, rescatar a
Luis Serra), y para ello tendrá que recorrer su propio camino y enfrentarse a sus propios peligros, destacando un persistente jefe que echábamos de menos hace algunos meses en el
Remake.
Precisamente algunas de las escenas que comentábamos en el análisis que no estaban en el origianl (como la zona y combate del teleférico) están también incluidas, con algo de nuevo metraje
para subir la intensidad hasta las 6 horas, un poco más si somos completistas (y algo menos si vamos a por todas desde el principio). Es un interesantísimo aliciente completar la historia de
Leon y las plagas con todas las piezas del puzle, y gracias a las mejoras y diferencias jugables, nuevos enemigos y pruebas inéditas resulta un placer hacerlo.
El complemento perfecto
Bueno, o casi, porque al fin y al cabo hablamos de un
remake, por lo que haber incluido este modo de lanzamiento tampoco era una locura... Sin embargo hay que reconocer que
al igual que con el juego original, Capcom ha ido mucho más allá que simplemente adaptarlo mejorando los gráficos, ha refrescado la jugabilidad, alargado la aventura, aumentado el contenido e incluido un buen montón de sorpresas, por lo que pagar un poco más (el DLC cuesta unos 10 euros de salida) no nos parece un
atraco precisamente.
La verdad es que
Separate Ways enriquece y complementa perfectamente la aventura de
Leon, nos deja ahondar en el - genial - personaje de
Ada y nos enfrenta a nuevas situaciones y desafíos, algunos muy demandados por los fans del título original. Es la guinda perfecta para el estupendo pastel que ha sido
Resident Evil Remake 4, y vais a terminar muy satisfechos después de comeros hasta la última miga.