Sony sigue haciendo cabriolas para intentar llamar la atención del gran público. Cada vez se ve más claro la estrategia de ir creando una comunidad alrededor del VR para poder seguir ofreciéndolo, no solo en la actual generación de consolas sino en próximas generaciones, adelantándose a la competencia y teniendo ya mucha más experiencia en ella.
A pesar de que cada poco tiempo salgan diciendo que los números de ventas son buenos, no lo son ni de asomo si los comparamos con cualquier otro periférico de características similares (repetimos que Kinect que es un periférico muerto vendió 8 millones de unidades, mientras que las VR no llegan a 2 millones y dos años después de su lanzamiento).
Este Mega Pack PlayStation VR es un pack que se nos antoja muy escaso para los que quieran meterse de lleno en este mundo de la realidad virtual. Por un lado, no trae los mandos Move que son imprescindibles para ciertos juegos (Astro BOT) y con los que se disfruta mejor otras experiencias (DOOM o Skyrim, por ejemplo). WipEout es un mareo total jugando con la VR y ASTRO BOT es una experiencia de poco más de 3 horas de juego que tiene elementos curiosos pero que no dirá nada al público general de la consola. Tanto DOOM como Skyrim son las dos mejores opciones pero, como decimos se disfrutan más con el Move (hay que comprarlo aparte) y no merece la pena pagar 329,99 euros por las gafas, la cámara y estos dos juegos cuando hace poco había una oferta de 199,99 sin juegos.
Realmente nos encantaría poder disfrutar de verdaderas experiencias VR, y a día de hoy hay muy poquitas. Es un campo en el que aún hay que trabajar mucho, y hay que reconocer a Sony el mérito de ser pioneros en esto y de seguir experimentando y de abrir camino. Aún así, y a día de hoy (finales de 2018), el VR sigue sin merecer de verdad la pena para la inmensa mayoría de usuarios de consolas.
Sony sigue pensando en atraer a más usuarios hardcore a su nuevo periférico de realidad virtual, lanzado a finales de 2016 y del que ha conseguido vender por encima del millón de unidades. Como ya os hemos dicho en otras ocasiones, éste es un número muy insuficiente para la compañía, quien sigue apostando fuerte por la realidad virtual, pero que no consigue rentabilizarla ni hacer que el grán público se interese por ella. De momento, sigue sin tener un catálogo de calidad que apoye la tecnología, y sin juegos ya sabemos que una consola o un periférico están condenados al más puro fracaso, y o bien Sony empieza a hacer las cosas de otra forma, o ya sabemos donde va a acabar la PS VR.
De hecho, es muy curioso, porque para estas navidades de 2017, hay muchos usuarios hardcore en España que ya tienen una PS4, y cuyo objetivo no está en intentar hacerse con las gafas de realidad virtual, sino con la PS4 Pro, en un intento por tener una consola que vaya a mejor tasa de frames y ofrezca mejores resoluciones que la actual PS4, y esto es algo que ya preveíamos en 2016 cuando ambos hardware se pusieron a la venta a la vez.
Repetimos que la experiencia de la realidad virtual no es nada mal, convence, y consigue meterte dentro de una experiencia de juego distinta por unos cuantos minutos, pero al poco tiempo lo olvidas y te centras en la jugabilidad, y esto es algo que la mayoría de los juegos de VR actuales no tienen en cuenta, ya que su gameplay se centra en meter al jugador en primera persona en algo que ya conocen hasta la nausea, y que además carece de la calidad gráfica por la que, en su momento, se compraron una consola como PS4 en lugar de elegir cualquier otra opción del mercado.
Ya lo hemos dicho en varias ocasiones, pero la realidad virtual no está vendiendo nada bien en ninguno de sus formatos, y mucho menos en PlayStation 4. A pesar de los constantes esfuerzos de Sony por decirnos que todo va bien, los números son más bien escasos. Decir que haber llegado al millón de unidades (que para cualquier otro producto sería muy bueno) es decir que va todo como debería, es ocultar la realidad tal y como está sucediendo. Tan solo bastaría decir que un periférico como Kinect vendió en pocas semanas 8 millones de unidades, y casi todos sabemos cómo acabó dicho periférico: En el más absoluto de los olvidos.
Seguimos con el mismo problema que casi cualquier periférico que sale en cualquier consola. Si no salen juegos realmente buenos y atractivos para el usuario, nadie querrá comprárselo, pero no deben salir un par o tres en un año, si no un catálogo lo suficientemente atractivo como para hacer que los jugadores se planteen gastarse los 400%u20AC que vale, no para poder jugar a un juego, sino con el objetivo de poder jugar a varios, aunque finalmente no se lo acaben comprando. Ocurre igual que con una consola. Por ejemplo, si me compro la Xbox One X es para poder jugar a 4 o 5 juegos a 4K y a 60FPS, y luego me acabo comprando uno o dos, pero el objetivo es lo que consigue hacerme comprar la consola (aunque la película de Microsoft es un poco distinta).
Cuando juegas a Farpoint o a Theseus, descubres que la experiencia no está nada mal, y que técnicamente no están nada mal tampoco, pero no es lo que uno se imaginaría a la hora de jugar con una PS4. La gente se compra (nos compramos) una consola de estas características para jugar a algo espectacular y realista (realista en el sentido gráfico, con muchos personajes, gráficos detallados, etc.) y el problema que tienen estos juegos es que demandan demasiado hardware como para poder ofrecer esta calidad técnica, así que tienen una calidad gráfica mucho más baja, afeando la experiencia.
Seguimos pensando que la conclusión a las declaraciones de los responsables de Sony es siempre la misma: Necesitaríamos un catálogo más completo, con más juegos de sagas muy conocidas (Skyrim solo no vale; hacen falta más), un precio inferior al que actualmente tiene (aunque sea a pérdida), y más calidad gráfica. Todo es posible aunque requiera trabajo y esfuerzo, excepto la calidad técnica, con la que PS4 por si sola no puede hacer nada.
Sony ha querido jugar como baza principal el concepto de \'VR Asequible\', ofreciendo el sistema de realidad virtual más barato del mercado (que no el mejor). Afortunadamente no han querido encarecer mucho el precio con los periféricos, y el combo de 2 Moves, 1 cámara y una \'demo\' (me niego a calificar eso como juego) por 100 euros es una oferta interesante siguiendo esa misma dirección. Un punto positivo después de ver cómo será el pack de lanzamiento...