Escenarios de Nioh 3

Exploración y Mundo Abierto

La estructura de mundo abierto en Nioh 3 introduce un sistema de zonas interconectadas con múltiples rutas, secretos y eventos dinámicos. Cada región está dividida en áreas principales y subzonas llamadas Purgatorios, espacios corrompidos por energía yokai que alteran las reglas de exploración y combate. En los Purgatorios, el entorno cambia visualmente y mecánicamente. La niebla yokai reduce la visibilidad, el Ki se drena más rápido y los enemigos se regeneran si no se purifica la zona. Para desbloquear el acceso completo, debemos encontrar focos de corrupción y eliminarlos mediante rituales o combates específicos.



El sistema de exploración se apoya en viajes temporales, que nos permiten acceder a versiones alternativas de las mismas regiones. Estas fracturas temporales revelan eventos históricos distorsionados, caminos ocultos y enemigos únicos. Las decisiones que tomemos en cada plano afectan el estado de las zonas en el presente. Cada región incluye misiones secundarias con narrativa propia, desafíos opcionales y recompensas exclusivas. Algunas misiones solo se activan si hemos completado eventos en planos alternos o si hemos interactuado con ciertos yokai aliados.

La verticalidad es clave en el diseño de niveles. Podemos escalar estructuras, descender a cavernas ocultas y desbloquear rutas mediante habilidades adquiridas. El uso de espíritus guardianes también influye en la exploración, ya que algunos permiten detectar enemigos invisibles, abrir portales o purificar zonas sin combate. El juego introduce eventos dinámicos que cambian según la hora del día, el plano temporal y las decisiones tomadas. Estos eventos pueden alterar la presencia de enemigos, desbloquear cofres especiales o modificar el comportamiento de NPCs.

La navegación se apoya en un sistema de mapa interactivo con marcadores personalizables, rutas sugeridas y alertas de corrupción. Podemos marcar zonas de interés, registrar rutas seguras y compartir configuraciones con otros jugadores.