Aspharr, el Reluciente Caballero Azul
Aspharr es un joven de 19 años, perteneciente a la orden de Los Caballeros del Templo. Porta un Orbe de Luz y una lanza laraga. Es el hermanastro mayor de Inphyy (de la que se preocupa mucho) y amigo de la infancia de Ectvarr, la Doncella de la Luz.
A pesar de su corta edad, Aspharr es un chico reflexivo que sabe mantener la cabeza fría. Odia los conflictos, prefiere no tener que darle órdenes a otros y no consigue entender por qué deben hacerse sacrificios humanos en nombre de la guerra entre los orbes.
Eso hará que Aspharr tenga un problema con su defición de la justicia, que ve demasiado influida por motivos relacionados con la política humana.
Dwingvatt, el Vengativo Guerrero Orco
Dwingvatt es un Goblin que vive en Fort Wyandeek y posee un Orbe de Viento. Por culpa de su piel, pálida como las de los humanos, Dwingvatt se siente ofendido por no parecerse a otros Orcos. Tenía a su hermano mayor Dwinga en la más alta estima (ya que siempre le ha ayudado en los momentos difíciles) y creía que era el modelo a seguir... hasta el día en que los Goblins sufrieron el ataque de los Caballeros del Templo, y su hermano fue asesinado por una mujer caballero.
Guiado por la vengaza y armado con 2 espadas curvas, Dwingvatt partió en busca de la mujer de la armadura roja para cobrarse su venganza.
Mientras intenta vengar la muerte de su hermano, las acciones de Dwingvatt reflejarán su determinación para convertirse en un Goblin fuerte y respetado.
¿Puedes ayudar a Dwingvatt a encontrar a la chica caballero y sellar el círculo del destino?
Inphyy, el Angel en la Armadura Carmesí
Inphyy is una chica de 17 años miembro de la orden de Los Caballeros del Templo. Utiliza fieramente una espada ancha carmesí, y porta un Orbe de Luz.
Su linaje está, según las leyendas, 'bendecido con la protección divina de la Luz y su padre fue un destacado guerrero en la 'Dividing War'.Inphyy tiene una fé inquebrantable en la orden de Los Caballeros del Templo y en su sentido de la justicia, y debe toda su lealdad a la Doncella de la Luz
La cabezonería de Inphyy es una fina protección que esconde su verdadera fragilidad: su inmensa adoración por su hermanastro, Aspharr. Por eso, su fiera insistencia en el camino de las justicia se convierte en una forma de enmascarar esos sentimientos.
Myifee : El Hombre de la Nobleza Oculta
Myifee is un mercenario de 32 años que porta un Orbe de Fuego. Cuando la gente ve su tímida sonrisa normalmente los juzgan mal; estamos ante un guerrero orgulloso que siempre da lo máximo de sí mismo, sea en el campo de batalla, en el amor o en un bar.
Nacido en el seno de una familia de astutos abogados y políticos, Myifee pronto aprendió a distinguir las distintas caras (púbilicas y privadas) de la gente que lo rodeaba. Aunque una vez perteneció a la orden de Los Caballeros del Templo, pronto los abandonó para convertirse en un soldado independiente, una vez que comprendió que la Armada Real estaba más interesada en ganar la guerra que en proteger a las indefensas masas.
Aunque algunas de sus decisiones puedan parecer imprudentes, Myifee es ante todo una persona que no puede cerrar los ojos ante la injusticia. En la guerra actual se ha ofrecido voluntario para ser el guardaespaldas del espadachín Epharr. Si arañas su superficie cínica encontrarás un hombre digno de confianza y con una pasión y sentido del honor desbordantes.
IMPRESIONES
Tras haber podido probar en profundidad la demo del juego, en la redacción hemos llegado a un total consenso: el título podría haber dado mucho más de sí. Os contamos por qué
Sistema de Juego
Básicamente lo único que tendremos que hacer en cada una de las fases es repartir mandobles a diestro y siniestro, luchando contra espectaculares grupos de decenas de enemigos simultáneos. En una fase normal conseguiremos miles de muertes y combos de más de 1000 golpes, ya que al estar tan absolutamente rodeados de enemigos los golpes normales se irán convirtiendo en devastadores golpes. Con sólo 2 botones (ataque rápido y fuerte) conseguiremos los combos principales, y un tercer botón nos permitirá (si tenemos la energía suficiente) realizar un ataque especial, convirtiéndonos nuestros ataques en golpes mucho más poderosos durante unos segundos.
El juego pronto se queda corto en cuanto a combos (y más porque unos son muchos más útiles que otros, lo que hará que repitamos los mismos una y otra vez) y la acción no tarda en hacerse monótona. Sí, es cierto que la barra de ataque especial que se carga cuando golpeamos ayuda a darle vida y espectacularidad al título (ver a decenas de enemigos volando en cada mandoble es genial), pero el desarrollo de las fases acaba aburriendo, porque se repiten una y otra vez las mismas situaciones. La aparente libertad de la que disfrutamos en cada fase es una ilusión, al menos en las primeras fases. Sólo hay una forma de completar cada nivel, y los caminos alternativos sólo nos llevarán a encontrar cofres...
En un intento de animar (y dar más variedad a) el juego, se añaden fuerzas de apoyo a las que podemos dar órdenes para que nos ayuden. La teoría, muy bien. El resultado, nefasto. Los soldados que nos acompañan son peleles que no van a dar cuenta de ningún enemigo, y su única utilidad es evitar que nos rodeen del todo (y a veces, ni eso), haciendo como que luchan con los enemigos y manteniéndolos ocupados.
Adicción
Pese a contar con varios personajes ocultos (3) y multitud de rutas y batallas para cada uno, el juego tiende a hacerse muy repetitivo. Los enemigos tienen una I.A. casi inexistente, por lo que el juego no supone demasiado reto una vez que le pillemos el truco; la inmensa mayoría de golpes que vamos a recibir vendrán por detrás mientras nos abrimos camino entre las hordas enemigas, por lo que simplemente tendremos que ir repartiendo en todas las direcciones para evitar que nos alcancen. Para no caer en la desidia más absoluta en el juego se incluirán también personajes especiales, como jefes y monstruos enormes, con los que tendremos que tener algo más de cuidado... pero básicamente no hay más.
El sistema de exploración es bastante regular; no es lo suficientemente abierto como para poder decir que no es lineal, pero aún así hay demasiadas ocasiones en las que vamos a dar vueltas innecesarias porque el mapa resulta ineficaz y las cámaras pueden ser nefastas.
Sin un modo cooperativo, el único factor que le suma algunos enteros al juego es un ligero toque de Action-RPG gracias al cual subiremos de nivel y habilidad al ir matando enemigos, haciendonos más poderosos y consiguiendo nuevas armas y objetos (que sueltan los enemigos al morir). Así, volver a las primeras fases cuando ya estamos cerca del final se convierte en una estupenda terapia anti-estrés.
Técnica
En este apartado, el juego se desinfla según vamos jugando; en las primeras fases es espectacular verse luchando en mitad de un enorme grupo de enemigos...La cosa cambia cuando nos damos cuenta de que todos son clónicos, y de que raramente vamos a ver más de 4 personajes distintos en pantalla. Además, los enemigos tienen pocas animaciones distintas, por lo que vamos a ver los mismos movimientos (al atacar y ser atacados) miles de veces, algo que hace que perdamos atención rápidamente...
Todo empeora al ver que no podemos jugar mucho con la cámara, que siempre se mantiene en una distancia media-cercana, algo que no funciona mal del todo en mitad de la batalla pero perjudica la exploración... Claro, si incluso de esta forma el juego presenta ralentizaciones puntuales (sobre todo al utilizar los ataques especiales, que tienen efectos de luz) no queremos imaginar lo que hubiera pasado con una cámara libre que tuviese zoom...
Cierra el apartado la bajísima I.A. de los enemigos, que es un doble problema. Por una parte hace que el juego pierda interés, ya que dar cuenta de cientos de enemigos se limita a nuestra habilidad con los combos, y por otra hace que bajemos la guardia continuamente y enemigos 'rapiñeros' acaben matándonos... con la consecuente frustración del jugador.
Conclusión
Gracias al magnífico servicio de Xbox Live, no hay que arriesgarse con el título... con una demo de algo menos de 600 megas podréis probar en profundidad una larguísima misión donde se ponen rápidamente de manifiesto los puntos fuertes y flojos de un título que pese a lo espectacular que resulta en la primera toma de contacto puede llegar a cansar rápidamente.
Los más pacientes (y aquellos que disfruten realmente con la mecánica repetitiva de combos y batallones) tendrán como recompensa un título mimado en otros aspectos; espectaculares vídeos, una historia bastante profunda (para el tipo de juego) y horas y horas de juego gracias a sus numerosos extras.
