En un juego como Metro Exodus, las armas son realmente importantes ya que dependerá en todo momento de cómo las usamos y de cuales para definir nuestro estilo de juego. Al igual que ocurre en la primera entrega de la saga, Metro 2033, en esta tercera parte también podremos personalizarlas para adaptarlas a nuestro estilo, añadiéndole extras que nos permitirán mayor potencia de fuego, más distancia o mayor sigilo.
Existen cuatro clases de armas en el juego, pistolas, escopetas, rifles y armas especiales. Cada una de ellas cuenta con sus propias características, potencia de fuego, alcance y dispersión, además de permitir distintos tipos de personalización con partes que iremos encontrando en nuestra travesía por la Rusia post-apocalíptica del juego. Otro detalle importante de todas las armas es que ahora cada una no solo pudiera personalizarse en el campo, dando lugar a cientos de permutaciones tácticas, sino también que es necesario limpiarlas y realizar su mantenimiento para evitar el sobrecalentamiento y que se atasquen.
Armas especiales
Dos son las armas especiales que encontraremos en el juego: Fusil Tikhar y la Ballesta Helsing. Ambas tienen sus propias características específicas, como la posibilidad de crear su propio tipo de munición.
Helsing
Perfecto para cazar, sea cual sea tu presa
La mejor arma cuando hay que ser sigiloso. Si tienes cuidado, puedes usar la misma flecha para despejar una zona sin llamar la atención.
Si no te preocupa el sigilo, puedes usar flechas explosivas para lograr mayor efecto.
Tikhar
Asesino silencioso y obra maestra de la ingeniería
El Tikhar se creó por la necesidad de disponer de un arma cuando había escasez de balas y se convirtió en una herramienta indispensable para los comandos espartanos.
Esta arma no solo usa las omnipresentes bolas de acero como munición, sino que es prácticamente silencioso. Esta arma usa un sistema neumático de alta presión para pegar fuerte y te permite usar balas incendiarias si es necesario.
Solo tienes que acordarte de mantener la presión alta.
Pistolas
Un arma ligera, versatil y personalizable, además de que permite disparar tan rápido como seamos capaces de pulsar el gatillo. Perfectas para el corto alcance y misiones de sigilo. No intentes dispara a largas distancias con ellas o te verás desbordado por armas más potentes. Estas armas pueden transformarse en fusil de medio alcance o en un subfusil de disparo rápido con piezas que iremos encontrando por el camino.
Bastard
¿Tienes un trozo de tubería, un cubo abollado, un yunque oxidado y unas tenazas? Perfecto, en un par de días podrías estar repartiendo plomo con una pistola Bastard. Esta popular herramienta entre los residentes del metro de Moscú, ha pasado de ser la pesadilla de los armeros a un arma semiautomática gracias a Tokarev. ¿Seguirá encasquillándose? Sí, pero el número de balas que puede escupir antes de fallar es suficiente para acabar con casi cualquier oponente.
Revolver
Esta arma clásica, fabricada originalmente en el metro, donde escaseaba la munición y la velocidad de recarga no suponía un problema, tiene suficiente poder de detención como para matar a un mutante en el acto si se hace un buen disparo.
El Revolver se inspira en el Nagant e incorpora un mecanismo de recarga accionada por gas. Se le pueden colocar supresores y otras modificaciones, como culatas de carabina y una amplia variedad de miras.
Escopetas
Puede que no tengan las formas a las que estamos acostumbrados, debido a que se han tenido que fabricar en base a piezas que los ingenieros del metro fueron encontrando. También muy útiles para el combate a corta distancia, más potentes que las pistolas pero más lentas en su uso y disparo.
Estos son las escopetas que tendremos:
La Escopeta Shambler
La Shambler ha convertido la escopeta común en algo más que eso. Es aterradora y letal para quien esté al otro lado del cañón. La Shambler, que sacrifica la fiabilidad, la simplicidad y el sentido común, es una escopeta automática puesta a punto por el maestro armero Tokarev. Su potencia de fuego solo se puede describir como un cruce entre una trituradora y una cortacésped.
Ashot
Una descarga de perdigones hará que incluso los mutantes más duros y perversos se lo piensen dos veces antes de atacar.
Esta escopeta tiene una larga lista de mejoras. Por ejemplo, puedes acoplar hasta un total de cuatro cañones. Y esto solo es el principio, porque también puedes elegir entre el amplio abanico de obturadores, culatas, compensadores de retroceso y miras para personalizar tu escopeta.
Rifles
Gran fiabilidad y durabilidad. Armas de asalto potentes y precisas que también se pueden personalizar para lograr incluso un disparo a larga distancia e incluso acabar con los enemigos más poderosos gracias a su potencia de fuego moderada y su impacto a media/larga distancia. De hecho, con tan solo unas pocas modificaciones conseguiremos un arma de francotirador para dar buena cuenta de los enemigos a larga distancia. El arma favorita de nuestra compañera Anna. Eso sí; hacen mucho daño, pero también mucho ruido.
Estos son los rifles de asalto que tendremos en el juego:
Kalash
El Kalash es una de las pocas armas de antes de la guerra y se ha usado en conflictos alrededor del mundo dada su inigualable fiabilidad y su potencia de fuego en combate. El Kalash estándar es un fusil de asalto eficaz en sí mismo, pero, gracias a Tokarev, la versión espartana acepta una gran variedad de mejoras, desde un tambor ampliado hasta miras personalizadas. Esta arma también se puede convertir en otras herramientas, como una pistola ametralladora o una ametralladora ligera.
Bulldog
Muy superior al Kalash en daño infligido, manejo, peso y precisión. También tiene una cadencia de tiro menor, por lo que es más fácil controlar cada ráfaga bajo presión. Aun así, pese a todo, es raro encontrar un Bulldog. Sus complejos mecanismos requieren un mantenimiento muy hábil para asegurar su buen funcionamiento. No es una sorpresa que muchos supervivientes prefieran a su «hermano mayor», el indestructible Kalash.
Valve
"
Mantén cerca a tus amigos y a tus enemigos", dicen. Y está muy bien, pero nunca se sabe cuándo vas a tener que enviar un pedazo de plomo al centro de un objetivo que está a varios cientos de metros. Cuesta encontrar fusiles de francotirador en la Rusia de la posguerra, y menos aún en buenas condiciones. Pese a ser un arma casera, el Valve es más que capaz en cuanto a precisión y la potencia del viejo cartucho para fusil basta para atravesar la mayoría de protecciones.