Una historia muy chulesca
En Killer is Dead nos trasladadamos a un futuro alternativo - muy alternativo, la estética y puesta en escena es uno de los puntos fuertes del juego - en el que los humanos hemos colonizado la Luna, y hay todo tipo de fuerzas sobrenaturales (como vampiros, mutantes o semidioses) viviendo con nosotros.
La acción nos mete en la piel de Mondo Zappa, un eficiente asesino que no teme enfrentarse a ninguno de estos seres superpoderosos; él mismo tiene un enorme poder de ataque tras haber perdido su brazo izquierdo y haberlo sustituido por uno mecánico y transformable, que le sirve como distintos tipos de cañón, taladro...
Zappa es la mano derecha (chiste fácil) de Bryan Roses, un contratista dispuesto a todo por dinero. En su organización se encuentran otros asesinos espectaculares, como Vivian Squall (una rubia impresionante capaz de multiplicar sus brazos y disparar con todos ellos a la vez)... Pero lo más divertido de Killer is Dead es la personalidad de nuestro héroe y los tira y afloja con otros personajes y enemigos.
En este nuevo vídeo podéis verlo en una de sus misiones para acabar con el Malvado Rey de la Luna, que ha sustituido a la diosa que la protegía (y ella ha ido a contratar a Mondo para que acabe con él).
Toques de estrategia y mucho sentido del humor
Aunque inicialmente el título se ha construido como un juego de acción no llegaremos muy lejos atacando a tontas y a locas; nuestro protagonista tiene 4 tipos de armas especiales, y cada una encaja a las mil maravillas en una situación concreta. Una vez estemos luchando podemos acabar con los enemigos y convertirlos en distintos tipos de energía (o puntos), y recargar estas armas para seguir repartiendo estopa... O convertirlos en vida para recuperarnos en parte de las heridas sufridas. El sistema es rápido y espectacular, y hay que estar atentos, o lo pasaremos muy mal. Posteriormente iremos evolucionando las armas de nuestro héroe, y haciéndonos cada vez más poderosos.
Sin duda lo más divertido de la demo del E3 eran las resurrecciones de nuestro héroe. Si Mondo cae inconsciente por las heridas tenemos la oportunidad de llamar a su asistente, la brutal Mika Takekawa, que salta al escenario para aporrearle el pecho a nuestro protagonista como si se tratase de un masaje cardiaco... Surrealista, pero muy divertido.
Pero lo que más llamaba la atención de la demo presentada en la feria eran las secuencias con las Mondo Girls; se trata de una especie de minijuego (incluido en la trama principal) en el que tendremos que seducir a las bellísimas chicas del juego, manteniendo la vista en sus partes más... Femeninas, siguiendo la conversación y manteniéndonos guays con el tema. Para ayudar existen distintos tipos de gafas especiales, y la que más furor causaban eran unas de rayos-x que dejaban a las féminas en ropa interior. Desde luego, no hablamos de un juego para niños, y los diálogos están muy a la altura.
A nivel jugable...
Podéis imaginaros que, con semejante pedigrí e ideas, Killer is Dead era uno de los títulos que más ganas teníamos de probar este E3; el juego de Grasshopper resultaba más que prometedor, y poder ponerle las manos encima en el feria era toda una tentación... Así que fue uno de los primeros juegos que probamos en el booth de Sony. Desgraciadamente, las primeras impresiones no fueron tan brillantes como esperábamos.
La base jugable de Killer is Dead es la de un hack'n slash, con Mondo dando espadazos a diestro y siniestro luchando contra hordas de enemigos, esquivando (además de proteger su vida, esquivar es necesario para no terminar aturdido con determinados ataques, o perderemos mucha más vida mientras agitamos el analógico como locos) y repartiendo estopa. Desgraciadamente la mecánica es un poco confusa, los combos no son ni tan intuitivos ni tan espectaculares como en otros juegos (estilo DMC) y la acción tendría a hacerse un poco repetitiva.
Otro de los puntos conflictivos del título era la opción de disparo, que teníamos que usar continuamente (junto a la espada) para acabar con distintos elementos del escenario, o con enemigos que se protegían / elementos explosivos del escenario. El problema es que, por defecto, el título cuenta con el control de apuntado invertido, lo que resultaba poco intuitivo y muy impreciso. Afortunadamente parece que esto se podrá cambiar (o eso nos dijo la chica que estaba de azafata para ayudar a los jugadores), pero resultaba muy incómodo y artificial.
Como explicación, hay que aclarar también que empezamos por el nivel 7 del juego (la pelea con un super-vampiro en un castillo lleno de enemigos), y nos faltó una curva de dificultad muy ajustada; quizá evolucionando desde el primer nivel, el sistema de juego no sea tan artificial y resulte más divertido.
Los enemigos finales sí que prometen ser uno de los puntos fuertes del título (marca de la casa), al menos en la experiencia que tuvimos; carismáticos, chulescos, con sorprendentes patrones de ataque.... Vamos, de lo más divertido.
Si todo sigue el ritmo previsto, Killer is Dead llegará al mercado el 15 de Agosto.