SuperGiant Games ha seguido depurando su excelente hack'n slash Hades desde su lanzamiento original en 2018 con acceso anticipado. En 2020 tuvimos el lanzamiento real de la versión 1.0 y en 2021 hemos tenido la consecuente salida en las nuevas consolas, Xbox Series y PS5, con algunas optimizaciones así como en lanzamiento físico, para alegría de los fans y los coleccionistas. Si aún no lo habéis probado (está en Game Pass), estáis dejando pasar una gran oportunidad de hacernos con uno de los mejores juegos lanzados durante los últimos años en casi cualquier género aunque, eso sí, también hay que adelantar que se trata de un juego bastante difícil, que aunque tiene una dificultad muy bien medida, va progresando conforme el jugador lo hace, y además nos hace repetir todo el juego cada vez que morimos, lo que también es un punto en contra.

En cuanto a sus mecánicas de juego, sus creadores han querido ilustrar los diferentes cambios y situaciones que vemos en su desarrollo desde que el juego se lanzó en acceso anticipado en 2018 hasta la versión de 2021, ya completa (denominada 1.0), y para ello han lanzado un vídeo mostrando cómo se juega y lo que vamos a encontrar en estas versiones.



Básicamente nos vamos a encontrar con un hack'n slash desarrollado con una perspectiva isométrica cuyos escenarios están hechos en 3D aunque no podremos rotarlos, lo que hace que los jugadores que no controlen bien las cámaras no tendrán problemas en hacerse con él. Nuestro protagonista es Zagreus, el hijo de Hades, quien intenta escapar del Inframundo para llegar hasta el Monte Olimpo, y en su camino tiene que pasar por diferentes zonas e ir venciendo a los diferentes enemigos a su paso. Es un juego con una dificultad elevada que, además, nos hará repetir las mismas zonas desde el principio una y otra vez en cada iteracción, pero los chicos de SuperGiantGames han conseguido que cada una de estas iteracciones sea diferente a la anterior añadiendo un buen puñado de elementos, con algunos elementos de roguelike como la disposición diferente de los calabozos.

Quizás, lo más interesante esté no solo en sus mecánicas divertidas y fáciles de hacerse con ellas, con tres movimientos de ataque y uno para esquivar con los que podemos hacer absolutamente todo. Durante el desarrollo de cada fase encontraremos un montón de personajes, dioses del olimpo en su mayoría, que nos irán otorgando poderes y habilidades y que nos harán extremadamente potente, con la salvedad de que en cada partida estos serán diferentes, sus poderes también diferentes, y su aparición aleatoria. De esta forma, cada nuevo intento se convierte en algo distinto, haciendo el juego mucho más dinámico que otros muchos hack'n slash con toques de roguelike del mercado.