Dying Light: The Beast
Contenido de pago (gratuito si tienes la edición Ultimate Edition de Dying Light 2)
Disponible en 2025 en consolas PlayStation, Xbox y PC
Duración estimada: 18 horas
Un DLC que no estaba previsto originalmente para Dying Light 2, y que finalmente llega como juego independiente que
no necesita de Dying Light 2: Stay Human para jugar. Eso sí, llega de forma gratuita a todos los usuarios de la Ultimate Edition de Dying Light 2 como premio para sus fans más acérrimos. En él volvemos a tomar el papel de
Kyle Crane, el protagonista del primero de los Dying Light, que tras pasar 13 años sometido a diversos experimentos, logra escapar y persigue a tus captores en busca de venganza, solo para descubrir que hay mucho más en juego. Te encerraron en una jaula como a un animal. Durante años, te sometieron a brutales experimentos que te han pasado factura. Pero ahora, el ADN zombi y el tuyo se han entrelazado, por lo que puedes desatar el poder de una bestia que fluye por tus venas, y nadie podrá arrebatártelo. Úsalo, y descubrirás que no es sólo una maldición.
Aunque la región no está tan poblada como antaño, aún quedan supervivientes y diversas facciones, además de numerosos horrores. Algunos te pedirán ayuda, y otros querrán matarte. Y eso por no mencionar la misteriosa criatura que ha hecho del bosque su coto de caza personal.
Como decimos, volvemos a tomar el papel de
Kyle Crane, el protagonista del primer juego que sigue vivo (según lo que hiciésemos al final del juego...) y cuya heroica intervención durante el primer brote del virus salvó a muchos de un destino peor que la muerte. Tras más de una década en cautividad, te encuentras en un mundo que se ha transformado, y no para mejor. Ahora, tendrás que utilizar las habilidades de supervivencia que te mantuvieron con vida hace tantos años para salvar aún más vidas inocentes.
El escenario elegido ha sido Castor Woods, un destino turístico, antaño floreciente, alberga un número cada vez menor de supervivientes y una población creciente de zombis. El mundo, que incluye escenarios naturales, pequeñas aldeas y complejos industriales, permite distintas opciones para recorrerlo, ya sea usando tus habilidades de parkour para conseguir ventaja sobre tus enemigos o subiendo a un 4x4 abandonado para huir de los horrores de la noche.
El día ofrece muchas posibilidades para explorar la región y aprovechar al máximo tu tiempo mientras aún brilla el sol. Pero tras la puesta de sol, las leyes de la naturaleza siguen su curso. La oscuridad tiende a sacar lo peor de la horda, dejándote sin otra opción que correr, esconderte o luchar. No tendremos que hacerlo en solitario, ya que al igual que Dying Light 1 y 2, The Beast permite juego cooperativo para cuatro jugadores.