Dragon Quest I & II HD-2D Remake es el remake de los dos primeros juegos de una de las sagas de JRPGs más longevas que existen en la industria de los videojuegos. Con un estilo pixelart 2D-HD (Octopath Traveller), Square Enix y Team Asano van a completar la trilogía de Erdrick, y que curiosamente tiene sus inicios en
Dragon Quest III, cuando sus responsables decidieron hacer una precuela de los dos títulos que ya existían en el mercado. De esta forma, Dragon Quest I & II HD-2D Remake es un remake compuesto de un pack con los dos primeros juegos de la saga, por lo que la historia se divide en dos dependiendo del juego al que juguemos.
Dragon Quest I: El origen de un héroe
En Dragon Quest I (1986), los jugadores encarnamos a un héroe silencioso, descendiente del legendario guerrero Erdrick, cuya misión es derrotar al
Señor de los Demonios, Malroth, que ha sumido al reino de Alefgard en la oscuridad. La trama, sencilla pero revolucionaria para su época, gira en torno a recuperar la
Bola de Luz, un artefacto mágico capaz de sellar al enemigo. Este viaje fundacional del JRPG moderno introdujo mecánicas como la exploración de un mundo abierto, el combate por turnos y la interacción con NPC para obtener pistas, sentando las bases de sagas como Final Fantasy o Pokémon.
En el remake, se mantiene esta estructura clásica, pero se añaden detalles narrativos que profundizan en personajes secundarios como la
Princesa Gwaelin, cuya relación con el héroe se explora con más matices mediante cinemáticas nuevas. Además, se han rediseñado localizaciones icónicas como la Cueva de la Ira con perspectiva isométrica y efectos visuales HD-2D, respetando el diseño original de Akira Toriyama.
Dragon Quest II: La herencia de Erdrick
Ambientado generaciones después del primer juego, Dragon Quest II (1987) sigue a tres descendientes del héroe original: el Príncipe de Midenhall, la Princesa de Moonbrooke y el Héroe de Lorasia. Su objetivo es detener a
Hargon, líder de un culto que busca resucitar a Malroth (el mismo antagonista del primer juego, ahora como una deidad destructiva). Esta secuela amplió el universo con un grupo de personajes jugables, un mapa más extenso y una narrativa que conectaba directamente con su predecesor, consolidando la Trilogía de Erdrick.
El remake introduce una novedad significativa: un cuarto personaje jugable, una misteriosa guerrera que aparece en el arte promocional y se une al grupo. Según filtraciones, podría tratarse de la Princesa de Cannock, un NPC relevante en el juego original, lo que añadiría capas inéditas a la trama y equilibraría las mecánicas de combate al permitir un equipo de cuatro miembros. Además, se incluyen escenas adicionales, como un encuentro con el demonio Belial destruyendo un Babygoyle, que refuerzan la tensión narrativa9.
Conexión narrativa y contexto histórico
La Trilogía de Erdrick se experimenta ahora en orden cronológico gracias a los remakes, aunque quizás le hubiese venido bien un cambio de nombre al estilo "Metal Gear Solid Delta, tercero en las entregas de MGS pero precuela del 1 y el 2. Dragon Quest III HD-2D (precuela, lanzado en 2024) precede a Dragon Quest I & II, permitiéndonos a los jugadores seguir la saga desde los orígenes del legado de Erdrick hasta su culminación. Este enfoque no solo enriquece la coherencia argumental, sino que también incluye easter eggs y diálogos que vinculan los tres juegos, como referencias al linaje heroico o apariciones de monstruos recurrentes como los Slimes.
Los originales, lanzados en la década de 1980, revolucionaron la industria con su accesibilidad y narrativa épica. Dragon Quest I vendió más de 2 millones de copias en Japón, popularizando el JRPG, mientras que Dragon Quest II refinó la fórmula con un sistema de party y enemigos más complejos. El remake preserva esta esencia, pero moderniza elementos como los mapas automáticos y la opción de acelerar las batallas, reduciendo la necesidad de grinding (repetición de combates para subir de nivel).
Innovaciones y legado en los remakes
El estilo
HD-2D no solo revitaliza los gráficos, sino que también integra una banda sonora orquestal remasterizada, aunque permite activar las pistas MIDI originales para los nostálgicos. Además, se han añadido secuencias inéditas, como un prólogo que explora el legado de Erdrick antes de los eventos de Dragon Quest I, enlazando con el remake de Dragon Quest III.
Estos cambios buscan atraer tanto a veteranos como a nuevos jugadores, ofreciendo una experiencia que honra el pasado mientras abraza las expectativas modernas. Como comparación, Final Fantasy VII Remake logró un equilibrio similar, aunque aquí se prioriza la fidelidad a la jugabilidad clásica.