Un año más tarde, Bandai Namco se sube al carro y decide lanzar un juego de Dragon Ball para Nintendo Switch, la consola de moda ahora mismo. Esto no está mal, ya que durante este 2017 no vamos a tener ningún videojuego de la conocida franquicia de manga y anime, y al menos así los usuarios de Switch tienen algo que llevarse a la boca. Sin embargo, cuatro meses más tarde, los usuarios de Xbox One, PS4 y PC contarán con la última versión de Dragon Ball Z, y que a todas luces superará por mucho su calidad, tanto gráfica como jugable (y en hype, ya ni digamos).
Los usuarios de Switch quizás deberían sentirse contentos de poder contar con un de los juegos de la franquicia, ya que desde hace ya algunos años (finales de la vida de Wii), no han visto ninguno si no contamos con Nintendo 3DS, pero está claro que no estarán demasiado contentos viendo que no van tener su propio Dragon Ball FighterZ, o ni tan siquiera ha sido confirmada una futura versión para ellos. Muy probablemente ocurrirá, y si Xenoverse 2 no vende mal, unos meses más tarde salga anuncien la versión, e incluso con todos los DLCs incluidos y algún extra como este Xenoverse 2. Aún así, la sensación que pueden tener los usuarios de Switch es que no se les está tratando de la misma forma y van siempre un paso por detrás, aunque sea normal y aún no se fien en ver si en esta consola hay público para Dragon Ball.