Diablo IV es, sin duda, uno de los grandes juegos de 2023 que compite por ser uno de los mejores juegos del año sin duda alguna. Sus entregas anteriores han sido todas grandes éxitos de crítica y público, y en esta cuarta entrega vamos a encontrar muchas similitudes con sus mecánicas de juego clásicas aunque retocadas para la ocasión, todo ello con un apartado técnico de lujo totalmente en 3D. Desde 1996, cuando Blizzard lanzó la primera entrega de su saga Diablo, hemos tenido un sistema de juego muy similar a lo que nos encontramos en Diablo IV, aunque en esta última entrega también vamos a encontrar un buen puñado de cambios y mejoras sustanciales con respecto a las entregas anteriores. Hablamos de un juego de rol de acción o
action-rpg (ARPG) con una perspectiva visual de tipo proyección paralela, es decir, una vista superior ligeramente isométrica. A pesar de ser un juego de rol de acción, la saga Diablo se aleja mucho de las dificultades tan altas de otros juegos del género como los tipo souls, y sus mecánicas de juego sin mucho más directas en el sentido de tener que usar masivamente las habilidades y ataques de nuestro héroe contra decenas de enemigos en pantalla que se derrotan (generalmente) con gran facilidad utilizando las diferentes habilidades y poderes que tiene nuestro personaje.
Pero. ¿Qué nos vamos a encontrar cuando el juego arranque? Empecemos desde el principio.
Historia
Diablo IV no cuenta con una historia lineal. Tiene lugar cincuenta años después de los acontecimientos de Diablo III: Reaper of Souls, tras la masacre de millones de personas por las acciones de los Altos Cielos y los Infiernos Abrasadores. En el vacío de poder, resurge un nombre legendario: Lilith, hija de Mephisto, el susurrado progenitor de la humanidad. Su dominio sobre Santuario penetra profundamente en los corazones de hombres y mujeres por igual, cultivando lo peor de sus habitantes y dejando al mundo como un lugar oscuro y sin esperanza.
La trama principal sigue los pasos de los personajes que persiguen a Lilith a través del Santuario. Los Horadrim juegan un papel clave en la historia del juego, al igual que Inarius. La enemistad entre él y Lilith es uno de los puntos clave de la trama del juego. Consulta nuestra
wiki de historia para conocer más detalles sobre el argumento del juego.
El inicio del juego
Tras el espectacular
opening inicial (otro de esos puntos clásicos de los juegos de Blizzard), Diablo IV nos propone escoger a uno de las
cinco clases disponibles de lanzamiento, el cual podremos personalizar en diferentes opciones de aspecto, ropaje y detalles en general. Estas cinco clases cuentan con un perfil concreto, de forma que veremos a un bárbaro masculino o una maga femenina, pero en el completo editor podremos cambiar su sexo y diferentes características físicas en dos opciones diferentes, más o menos guiada según nuestras preferencias, así como seleccionar la
dificultad del juego en sus dos opciones iniciales, fácil y normal.
Consulta nuestra
wiki de dificultad para conocer más detalles sobre los World Tier y eventos de pesadilla que se activan en el Endgame.
Una vez creado, el juego nos permite explorar un mundo abierto por primera vez en la saga en el que tendremos unas mecánicas muy similares a entregas anteriores, lo que nos lleva a hablar con personajes que encontremos en diferentes zonas seguras, ciudades, pueblos y asentamientos, donde tendremos que aceptar sus misiones, y adentrarnos en las diferentes zonas del juego acabando con hordas de enemigos que se nos echarán encima.
Puedes echarle un vistazo más completo a nuestra
guía de personajes de Diablo IV, con sus características y habilidades de cada uno de ellos.
Mundo abierto
Estamos acostumbrados a que muchos juegos de mundo abierto los podemos explorar con una vista trasera al personaje, aunque los primeros juegos de mundo abierto, incluso el primer Grand Theft Auto, contaban con un mundo abierto y una perspectiva superior del mismo. En Diablo IV volvemos a la tierra de
Santuario que tantas veces hemos visitado y en la misma vista o perspectiva que anteriores juegos de la saga, denominada de proyección paralela, y que viene a ser una vista desde el cielo ligeramente inclinada, y aún así, contaremos con un mundo abierto dividido en cinco grandes zonas a explorar sin carga de ningún tipo y con una transición gradual entre ellas, cada una plagada de sus propios peligros. Eso sí; el tiempo ha pasado por ella y muchas zonas que conocemos habrán cambiado ostensiblemente, y aunque veremos algunas zonas similares a lo que ya conocemos, la mayoría de ellas serán totalmente originales.
El mundo de Santuario está dividido de cinco grandes zonas que explorar, y estas serán siempre iguales entre sí cada vez que las visitemos. Entre ellas encontraremos muchas zonas entre mazmorras y zonas interiores, que son generadas por procedimientos o procedimental, es decir, que en cada iteración que visitemos se creará una instancia aleatoria en base a una serie de patrones para que nunca sea igual dos veces en las que entremos. Las cinco grandes zonas de Diablo IV son estas:
Cimas Quebradas
Unas montañas frías y escarpadas al este con arquitectura gótica. Aquí residen misteriosos monjes que realizan extraños rituales. En esta zona encontraremos la ciudad de Kyovashad. Justo al llegar a esta zona será cuando comenzaremos a ver a otros jugadores a nuestro alrededor, y en el lugar donde podremos adquirir nuestra primera montura con la que recorrer distancias largas más cómodamente.
Scosglen
Bosques espesos y brumosos al norte llenos de bestias salvajes. El hogar de los druidas.
Estepas Adustas
Vastos cañones polvorientos y praderas al oeste que son el hogar de tribus guerreras de bárbaros y caníbales.
Kehjistán
Desiertos abrasadores al suroeste que albergan ruinas antiguas con tesoros por doquier.
Hawezar
Pantanos venenosos infestados de plantas y animales mortales al sureste. Un aquelarre de brujas residen en la región.
Visitar nuestra
wiki de zonas y mapas para averiguar más de cada uno de los lugares.
Componente MMO
Una de las grandes diferencias de esta entrega con cualquier otra de la saga es que Diablo IV cuenta con un componente multijugador muy marcado. Es más;
podríamos decir que el juego tiene algunos componentes que toma prestados de juegos de corte similar a Destiny. Y esto es debido que vamos a encontrar un juego que se desarrolla en el mundo abierto definido anteriormente, pero en el que además veremos a otros muchos jugadores a nuestro alrededor, jugadores que participarán en cualquier enfrentamiento que se realiza al aire libre. En el mundo abierto también veremos multitud de eventos que tienen lugar en tiempo real y en los que participan otros jugadores si estos se encuentran alrededor, o bien quieren participar, y que al finalizar obtendrán looteo.
Sin embargo, cuando entremos en ciertas zonas, como en las mazmorras o en lugares cerrados o ciertas misiones concretas, se crearán instancias en las que solo estaremos nuestro grupo si jugamos en coop, o nosotros en solitario si jugamos por nuestra cuenta. De esta forma, en la superficie y en las ciudades veremos a otros jugadores mientras que en las zonas cerradas estaremos por nuestra cuenta.
Jugar con amigos en cooperativo
Si queremos adentrarnos en Diablo IV con amigos podemos hacerlo. Tenemos opción de cuatro jugadores en cooperativo online tanto en PC como en consolas, y solo dos jugadores en cooperativo local en consolas. Más detalles en nuestra
wiki sobre juego cooperativo.
Microtransacciones
¿Hay miedo de "
pay2win" por culpa de las microtransacciones? Tras Diablo Inmortal, la versión para móviles del juego, Blizzard confirma que vamos a contar con microtransacciones, es decir, con la opción de poder comprar objetos dentro del juego con dinero real, aunque
solo tendrán un efecto estético, es decir, podremos comprar diferentes cosméticos como adornos para nuestras vestimentas o tatuajes para nuestros personajes.
Fecha de lanzamiento
Diablo IV se lanzará simultáneamente para PS5, PS4, PC, Xbox Series X y Xbox One, y estará disponible en todas estas plataformas a partir del 6 de junio de 2023.
Game Pass
De momento no hay planes para que Diablo IV llegue a Game Pass. Va a ser sin duda uno de los grandes superventas de 2023, y esta clase de juegos (los que venden) no suelen acabar de inicio en el servicio de suscripción de Microsoft. La compañía americana se encuentra actualmente (
mayo de 2023) en punto muerto en la compra con Activision Blizzard, creadores del juego, por lo que próximamente va a ser complicado que acabe en este servicio. No obstante, otros juegos de esta compañía sí que han acabado en Game Pass, por lo que no hay que descartarlo definitivamente.