Personalmente no me considero fan de los juegos de móviles por un motivo principal como es el de su control. Cuando intento jugar a cualquier cosa de móviles me siento un auténtico inútil intentando imitar los movimientos de una cruceta digital o un analógico con el dispositivo táctil y acabando con el pulgar en medio de la pantalla, lo cual es frustrante. Obviamente, esto se soluciona comprando uno de los miles de mandos que existen USB y acoplarlo al móvil, aunque no es una solución ideal para cualquier juego al tener que acabar mirando una pantalla demasiado pequeña como para disfrutar de la experiencia. Quizás, por todo ello y algunas razones más, prefiero dejar de lado los juegos de móviles y centrarme en portátiles o en juegos de salón.
Sin embargo, sí que tengo que reconocer que he disfrutado con algunas experiencias en estos dispositivos, y que cada día más quiero experimentar más juegos viendo cómo muchas desarrolladoras traen sus experiencias a esta plataforma que, por regla general, sale mucho más barata de desarrollar por tener una base de usuarios mucho más grande que cualquier consola de videojuegos. Es una opinión como otra cualquiera, y ahora con Switch se puede decir que tengo lo mejor de móviles, lo mejor de consolas de salón y lo mejor de las portátiles en un único dispositivo, lo que para mi personalmente es perfecto.
Aún así, un anuncio como Diablo Immortal me ha dejado ligeramente frío por no ser lo que esperábamos de la franquicia, ya que después de haber disfrutado con las entregas anteriores en PC y posteriormente en PC, consolas y ahora Switch me esperaba una cuarta entrega real en cualquiera de estos dispositivos. Sin embargo, hablamos de Blizzard, quienes han sido capaces de crear algunos de los mejores juegos del mercado como Overwatch o World of Warcraft, por no contar con el propio Diablo que en su momento fue pionero de muchos detalles de los juegos de rol de acción cooperativos. Por ello, la verdad es que tengo muchas ganas de ver qué son capaces de hacer en móviles y/o tabletas, experimentar lo que quieran contarme, probar sus virtudes y crearme unos cuantos de personajes para ver si este nuevo MMORPG (es como lo venden, aunque más bien parece un cooperativo para 6 jugadores) es justo lo que queremos jugar o si es otro de esos experimentos de móviles que se acaban desechando por la inmensa mayoría de jugadores de videojuegos hardcore.
Por supuesto, me hubiese encantado poder jugarlo y probarlo en PC, pero hay que darle una oportunidad y no criticarlo (en exceso al menos) hasta que lo tengamos en nuestras manos, nunca mejor dicho.