¿Qué es La Reina Bruja?
Bungie sigue actualizando su Destiny 2, el juego por excelencia de los conocidos como
juego como servicio, y ahora le toca hacerlo con una expansión completa, la sexta de las lanzadas desde 2017 que salió el juego, además de con el inicio de una nueva temporada. En ellas nos vamos a enfrentar a un nuevo tipo de enemigo, la Colmena Lúcida, vamos a poder visitar una nueva ubicación, el Mundo Trono de la Reina Savathun, y vamos a poder realizar nuevas misiones de campaña (cooperativo hasta tres jugadores), con dos nuevos asaltos (actividad cooperativa para tres jugadores con matchmaking), una nueva incursión (actividad muy difícil para seis jugadores sin matchmaking), y una nueva actividad cooperativa con matchmaking para seis jugadores que se activa cuando nos terminemos la campaña principal (Manantial).
Novedades
Hay muchas novedades que vamos a encontrar en esta nueva expansión, algunas pequeñas y otras más grandes, que crean un conjunto muy apetecible para los fans que llevamos años jugando a Destiny 2. Vamos a encontrar las que se esperan en cualquier expansión de este juego, con una nueva historia, nuevas misiones, nuevos asaltos, incursión, y demás, pero hay una que a mi me ha llamado mucho la atención y que venía siendo una petición por parte de millones de fans en todo el mundo, y que finalmente se han introducido. Hablo de la posibilidad de
repetir las misiones de la campaña y sectores perdidos (un tipo de misión libre dentro del mapa) en modo legendario, esto es, con una dificultad mucho mayor de la que la jugamos la primera vez y, además, con limitaciones en poder de nuestro personaje y otras penalizaciones. De esta forma, este tipo de misiones también se pueden utilizar en las rotaciones semanales añadiendo mayor dificultad cuando tengamos el nivel de luz mínimo.
La otra gran novedad viene gracias a la historia, con el uso de la luz en los enemigos. Esto quiere decir que los enemigos más poderosos a los que nos enfrentemos tendremos que acabar con ellos de la forma habitual (a tiro limpio), pero después tendremos que coger su espectro y acabar con él antes de que resuciten y tengamos que volver a hacerlo, lo que cambia ligeramente algunas de las mecánicas de juego. Aparte de esto, también tenemos otra actividad cooperativa con matchmaking para seis jugadores, el Manantial, y que viene siendo algo similar a lo visto en otros modos de juego. Un punto central que hay que proteger, un tiempo predeterminado en el que hay que hacerlo, y hordas de enemigos que finaliza con un gran enfrentamiento.
La mayoría de cosas que vamos a ver en esta expansión han sufrido algún tipo de retoque, especialmente en la forma en la que son jugados, aunque muchos son muy pequeñitos y, quizás, inapreciables para los que no hayan pasado horas en algunos de sus mundos. Algunas misiones de historia tienen elementos más complejos que solo veíamos en los asaltos, incluso en los del primer Destiny. También hay nuevos tipos de eventos públicos que utilizan algunos de estos elementos de historia y que nos llevan a proteger un elemento móvil mientras hordas de enemigos lo asaltan, algo típico en otros muchos juegos pero novedoso en D2. Fases con plataformas, una
incursión realmente espectacular, y una historia que se vuelve cada vez más interesante con nuevos personajes que llegan al final de la misma son algunas de sus grandes bazas. Eso sí; asegúrate de tener mucho tiempo libre, y a ser posible, unos cuantos amigos para compartir la experiencia.
Soy nuevo en Destiny 2: ¿Me voy a enterar de algo?
Uno de los grandes fallos que tiene el juego en general es, precisamente, lo difícil que es para los nuevos jugadores entrar en el juego. Con cada nueva expansión, la historia continúa un poquito más, como si fuese cualquier otro juego con una expansión y, sin embargo, al eliminar parte del contenido de expansiones anteriores y no permitir a los jugadores averiguarlo de ninguna forma, a los nuevos les puede costar mucho más trabajo saber de qué va todo esto. Incluso vamos a escuchar a ciertos personajes que ya no forman parte de la plantilla de personajes habituales, por no estar alrededor o haber muerto en algún momento de la historia y, sin embargo, no sabremos nada del motivo de esto.
Con la expansión anterior, Más allá de la Luz, Bungie añadió un destino (zona) ya existente en Destiny 1 con el objetivo de ofrecer una pequeña explicación de dónde venían los guardianes y cuál era la historia del juego, lo cual no está nada mal, pero se limitó a ofrecernos una visión de la creación de la saga, nada de dónde vienen todos los personajes, las situaciones vividas, o un pequeño compendio o animación que nos explique muchas cosas. Con La Reina Bruja seguimos con el mismo problema, y mientras que los más veteranos estamos disfrutando por seguir conociendo la historia más en profundidad, para los nuevos puede resultar un poco frustrante no saber de dónde venimos ni hacia dónde vamos.
¿Merece la pena La Reina Bruja, la nueva expansión para Destiny 2?
Bungie ha contado con algunos meses adicionales para poder redondear esta expansión, La Reina Bruja, y ha conseguido un resultado magnífico que iguala, o incluso mejora, a cualquiera de las lanzadas hasta ahora en historia, contenido, misiones, asaltos, y endgame. La experiencia es también un grado, y se nota el intento por mejorar todos esos elementos que muchos fans Destiny se han quejado. Un nuevo destino mucho más complejo que los anteriores, más cosas para hacer en el endgame y más complejas,
la vuelta de muchas zonas de plataformas que tanto nos gustan, poder repetir toda la historia con un nivel de dificultad mayor, misiones para después del final de la campaña (endgame) más profundas, añadir un par de modos de juego adicionales, o una nueva clase de armas para nuestros guardianes, que si bien no resultan (al menos para mi) suficientemente atrayente, sí que le añaden un plus al ser una combinación de un arma de fuego y las espadas ya conocidas, incluso con la opción de un escudo para protegernos.
Es complicado analizar o dar una opinión sobre una expansión de un juego como este, especialmente porque llevamos más de tres años de actualizaciones, y Bungie ha mejorado muchísimo su modelo de juego como servicio desde su lanzamiento, creando incluso una referencia en la industria a la que todas las demás compañías que pretendan seguir sus pasos deberían, al menos, imitar. Por eso es complicado separar La Reina Bruja de todo el contenido que ya hemos tenido y de todas sus temporadas, o de la expansión anterior (Más allá de la Luz). La historia evoluciona, los modos y mecánicas se añaden a lo que ya conocemos para redondearlos aún más, tenemos un nuevo tipo de armas, mejora en una de las nuevas clases, enemigos, y localizaciones, y cada mes y poco se siguen añadiendo cambios a toda la experiencia que nos hacen regresar y seguir metiéndonos de lleno en este universo. El agujero negro que resulta ser Destiny 2 me atropó durante unos años, pero con duro esfuerzo conseguí salir de él y disfrutar de otros juegos, y con La Reina Bruja me ha vuelto a atrapar de lleno, para desgracia de la gente que quiere quedar conmigo.
Opinión final - La Reina Bruja
Merece la pena darle una oportunidad al juego y a su expansión, especialmente si tienes amigos y te gustan los shooters en primera persona. Eso sí, una advertencia:
Destiny 2 es como un agujero negro que te absorberá sin remedio, no solo hasta terminar la campaña que merece la pena y mucho, sino incluso más allá intentando ganar el nivel necesario para realizar las misiones más difíciles, que además son las más espectaculares, y poder así conocer muchos más detalles sobre este fantástico y rico mundo que Bungie sigue tejiendo para nosotros.