Más allá de lo abordado en el artículo, Call of Duty: Black Ops 7 introduce también cambios estructurales en su ecosistema competitivo y social. El nuevo sistema de Operaciones Clasificadas permite participar en eventos semanales con objetivos específicos y recompensas exclusivas, fomentando la colaboración entre jugadores. Se ha rediseñado el hub social para facilitar la formación de escuadrones, el seguimiento de estadísticas y la gestión de progresos compartidos. Además, se ha confirmado la integración total con Warzone, permitiendo que operadores, armas y habilidades desbloqueadas en campaña y Endgame se utilicen en el battle royale. Esta convergencia entre modos no solo amplía la rejugabilidad, sino que refuerza la cohesión narrativa y jugable del título. Call of Duty: Black Ops 7 no se limita a ofrecer contenido nuevo: propone una forma distinta de entender el universo Black Ops, donde cada decisión, cada misión y cada enfrentamiento construyen una experiencia conectada, profunda y estratégica.
Campaña narrativa: paranoia, tecnología y guerra psicológica
La campaña de Call of Duty: Black Ops 7 nos sitúa en el año 2035, en un mundo fracturado por conflictos geopolíticos y una guerra encubierta que se libra tanto en el terreno físico como en el mental. El protagonista principal es David Mason, líder del equipo JSOC "Specter One", quien se enfrenta al resurgimiento de Raul Menéndez, el antagonista icónico de entregas anteriores. La historia se desarrolla en escenarios diversos como los tejados de neón de Japón, la costa mediterránea y la ciudad ficticia de Avalon, un núcleo urbano que oculta secretos capaces de alterar la percepción de la realidad. La narrativa se construye sobre el conflicto entre Mason y Emma Kagan, CEO de The Guild, una corporación tecnológica que manipula la información y la conciencia colectiva para controlar el caos global. La campaña explora temas como el miedo como arma, la distorsión de la memoria y el uso de IA para alterar la voluntad humana.
Cada misión de la campaña está diseñada con una estructura semiabierta, como ocurriese en algunas de las misiones de la anterior entrega de la saga, Black Ops 6, permitiendo múltiples enfoques tácticos y decisiones que afectan el desarrollo de los personajes. Además, como también ocurriese en Black Ops III, Balck Ops 7 también se puede jugar en cooperativo hasta cuatro jugadores, lo que transforma la experiencia narrativa en una operación conjunta. Esta modalidad no solo permite compartir progresos, sino que también desbloquea XP de armas, camuflajes y operadores que se trasladan a los modos Multijugador, Zombis y Warzone. El sistema de progresión global convierte cada partida en una inversión estratégica, donde cada acción tiene consecuencias más allá del modo historia. La campaña culmina con la apertura de Avalon como entorno jugable en el modo Endgame, ampliando la narrativa hacia una experiencia persistente y rejugable.
Modo Endgame: Avalon como campo de operaciones persistente
Endgame es la gran novedad de Call of Duty: Black Ops 7 y redefine el concepto de campaña post-narrativa y lo acerca a otros conceptos similares a los de juegos como Destiny 2. Una vez completadas las once misiones principales, se desbloquea el acceso completo a Avalon, una ciudad mediterránea dividida en distritos con distintos niveles de amenaza. Este modo PvE para hasta 32 jugadores nos permite realizar misiones emergentes que van desde sabotajes tecnológicos hasta rescates civiles, todo en un entorno abierto y dinámico. Cada incursión en Avalon implica riesgo: si logramos exfiltrar con éxito, conservamos el equipo y las recompensas; si fracasamos, lo perdemos todo. Esta mecánica de riesgo-recompensa añade tensión y estrategia a cada sesión, obligándonos a planificar cada movimiento con precisión.
Narrativamente, Endgame funciona como un epílogo interactivo. Las misiones revelan fragmentos ocultos de la historia de The Guild, sus experimentos con IA y los efectos psicológicos de sus armas. Entre las misiones más destacadas están Operación Eclipse, Zona Cero, Cuarentena Roja y El Nexo, cada una con recompensas únicas como habilidades desbloqueables (Grapple Hook, Mega-Jump, Deployable Shield), armas exclusivas (VX-9 Specter, Razorback Mk.II) y progresión en el sistema Combat Rating. Además, se introducen operadores jugables como Leilani Tupuola y Eric Samuels, que aportan nuevas perspectivas narrativas. Endgame no solo amplía la historia, sino que se convierte en un ecosistema jugable que conecta todos los modos del juego, ofreciendo una experiencia profunda, táctica y emocionalmente intensa.
Multijugador: combate fluido, mapas verticales y especialidades híbridas
El multijugador de Call of Duty: Black Ops 7 se lanza con 16 mapas 6v6 (13 nuevos y 3 clásicos de Black Ops 2) y 2 mapas 20v20 diseñados para el nuevo modo Skirmish, que combina objetivos múltiples, vehículos, wingsuits y ganchos de agarre. La mecánica de Omnimovimiento regresa con mejoras que permiten saltos en pared, desplazamientos verticales y maniobras evasivas sin recurrir a jetpacks. Esta movilidad avanzada transforma el diseño de los mapas, que ahora incluyen múltiples niveles, rutas alternativas y zonas de combate vertical. El sistema de Overclock permite mejorar rachas, equipamiento y habilidades según su uso, añadiendo profundidad estratégica y personalización.
Además, se introducen las Especialidades de Combate Híbrido, que combinan ventajas ofensivas y defensivas adaptadas al estilo de juego de cada operador. Por ejemplo, un jugador centrado en sigilo puede combinar invisibilidad temporal con sensores de proximidad, mientras que uno más agresivo puede potenciar su velocidad y daño en combate cuerpo a cuerpo. El arsenal inicial incluye 30 armas (28 de fuego y 2 cuerpo a cuerpo), muchas de ellas inéditas en la franquicia, con opciones de personalización que afectan no solo al rendimiento, sino también a la estética. El sistema de progresión global permite que todo lo desbloqueado en multijugador se transfiera a Endgame, Zombis y Warzone, creando una experiencia integrada y coherente. Cada partida se convierte en una oportunidad para mejorar, experimentar y dominar nuevas tácticas en un entorno competitivo y dinámico.
Zombis: supervivencia, narrativa expandida y exploración con vehículos
La modalidad Zombis en Call of Duty: Black Ops 7 regresa con una propuesta ambiciosa: el mapa más grande jamás creado en la saga, con zonas interconectadas que pueden explorarse mediante vehículos. Esta expansión permite una jugabilidad más táctica, donde debemos gestionar recursos, rutas de escape y puntos de defensa en tiempo real. Se retoman los mapas de supervivencia clásicos, pero con una narrativa que continúa los eventos de Black Ops 6, enfrentándonos a versiones alternativas de Richtofen, Nikolai, Takeo y Dempsey. La historia se entrelaza con la campaña principal, revelando cómo los experimentos de The Guild han afectado dimensiones paralelas y líneas temporales.
Además, regresa el modo oculto Dead Ops Arcade 4, un shooter de doble stick que añade variedad al conjunto, con desafíos arcade, enemigos surrealistas y recompensas cosméticas exclusivas. El sistema de progresión permite desbloquear armas, habilidades y operadores que se trasladan a otros modos, manteniendo la coherencia del universo jugable. Las misiones en Zombis también incluyen objetivos secundarios como la activación de portales, la recolección de artefactos y la defensa de zonas críticas, lo que añade capas de estrategia y narrativa. Esta modalidad no solo ofrece acción frenética, sino también una experiencia inmersiva que conecta con los temas centrales del juego: la manipulación mental, la distorsión de la realidad y la lucha por conservar la identidad en medio del caos.