Bloodborne ha sido una de las grandes sorpresas este E3; con los DLCs de
Dark Souls 2 en camino y las legiones de fans del juego de rol esperando un
Dark Souls 3,
FromSoftware y Sony han dado un giro de timón, y nos han presentado Bloodborne (que ya os avanzamos hace semanas como
Project Beast), en exclusiva para PS4. ¿Es una continuación? ¿Algo distinto? ¿La evolución natural aprovechando las posibilidades de la consola más potente del mercado?
Poneros la ropa de cazadores de monstruos y acompañadnos a descubrirlo en este especial, que hemos dividido en dos partes.
No es Demon Souls 2, pero se le parece muchísimo
Uno de esos juegos que a casi todo el mundo le hubiese gustado ver y que finalmente tuvo una pequeña aparición en forma de vídeo con una escena cinemática CG, además de tener la confirmación de cual será su nombre final que, aunque muchos esperábamos que fuese algo más similar a Demon Souls, finalmente Sony optó por otro camino. Pero, ¿qué nos trae esta nueva franquicia creada por FromSoftware (creadores de Demon Souls y Dark Souls) y Sony Computer Entertainment Japan?
Había muchas ganas de que apareciese el recientemente anunciado nuevo juego de
FromSoftware en colaboración con
Sony Computer Entertainment Japan que será exclusivo para PS4 (obviamente, por la implicación directa de Sony y que muy probablemente no aparezca en PC tampoco como ocurriese con Demon Souls) que finalmente recibirá el nombre de (aunque hubiese molado mucho que se hubiese llamado
Demon Souls 2, ¿a que sí?). Uno de los directores del juego en FromSoftware nos confirmaba que
Bloodborne no tiene absolutamente nada que ver con la saga Souls, aunque parece que esto tiene más que ver con un intento por evitar problemas legales. Por eso, los usuarios de Xbox One no deben preocuparse demasiado, muy probablemente tendrán su Dark Souls 3, aunque no será éste que será exclusivo para la máquina de Sony.
Y decimos que no será éste porque una vez que la demo empezó quedo muy claro que
lo que teníamos delante se sentía y se jugaba exactamente igual que cualquiera de los juegos anteriormente mencionados (Demon Souls o Dark Souls), aunque técnicamente muchísimo mejor . También contaba con la misma perspectiva en tercera persona, e idéntica posición de la cámara, para atraer de alguna forma a todos aficionados a la saga Demos. Eso sí, había algunos cambios evidentes al tener delante una nueva franquicia (IP, como le llaman los americanos).
Ambientación
Para empezar, la ambientación era totalmente distinta. Si bien tanto Demon como Dark Souls tienen una temática más medieval, este
Bloodborne estará ambientado en un universo ficticio con un estilo mucho más similar al del siglo XIX, y aunque no quisieron decirnos nada sobre ningún aspecto del juego, era patente que teníamos delante a algún tipo de cazador de monstruos, quizás muy al estilo de caza-vampiros o de hombres-lobo...
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El personaje
Como ya hemos dicho, la jugabilidad parece sacada directamente de cualquiera de los juegos anteriormente mencionados, es decir, Demon o Dark Souls. El personaje que se presentaba en la demo (sobre el que tampoco quisieron darnos ningún detalle) tenía un aspecto mucho más parecido a un
Van Helsing o cazador de vampiros, con un sombrero de ala ancha de color oscuro, al igual que el resto de su vestimenta, pantalones, camisa, chaleco y por encima una pequeña capa en la que, dicho sea de paso, se le quedaba la sangre al matar enemigos y se reflejaba la luz en ella (espectacular cualquier detalle que se pudo ver)...
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Hasta aquí esta primera entrega de este especial. La semana que viene os ofreceremos
la segunda parte, centrándonos en la mecánica de juego, los enemigos y nuestra conclusión. No perdáis de vista
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