Lo que hemos visto del juego nos recuerda a lo que podría ser una "versión española" de un juego de estilo soulslike, aunque también vemos algunos otros elementos de lo más curiosos en su sistema de combate o en la personalización de nuestro protagonista. En Blades of Fire, cada enfrentamiento exige análisis y precisión: de una forma similar a juegos como The Surge, podemos atacar partes específicas del cuerpo del enemigo (como articulaciones o puntos débiles en la armadura) para maximizar el daño. Si un rival blinda su torso, una estocada rápida (thrust) en las piernas podría derribarlo, mientras que un golpe contundente (blunt attack) rompería escudos. Esta capa táctica se potencia con el sistema de peso y longitud del arma: una espada ligera permitirá esquivar ágilmente, mientras un martillo pesado ralentizará vuestros movimientos pero destrozará defensas. Según Neil Ralley (presidente de 505 Games), esta mecánica es "una evolución natural del combte en Sekiro", pero con un giro único: nuestras decisiones de fabricación alterarán por completo el flujo de batalla.
Y es que el núcleo de Blades of Fire reside en su sistema de forja. No se trata de elegir entre armas predefinidas, sino de crear herramientas únicas combinando 7 familias de armas (espadas, hachas, lanzas, etc.), 30 pergaminos de forja y materiales como aleaciones divinas o runas ancestrales. Cada detalle, desde el filo hasta el mango, afectará estadísticas como durabilidad, penetración o equilibrio. ¿Ejemplo? Una hoja de metal divino (Divine Metal) ignorará armaduras, pero será frágil; si la compensáis con un mango reforzado, ganaréis estabilidad a costa de velocidad. Además, los Scrolls (pergaminos) desbloquean habilidades pasivas: desde venenos que debilitan enemigos hasta modificadores que buffean (mejoran) vuestra resistencia al fuego. MercurySteam asegura que habrá "más de 10 millones de combinaciones", permitiendo adaptar cada arma a vuestro estilo: sigiloso, agresivo o defensivo.
En cuanto a su historia, acompañaremos a Adso, un erudito que no solo aporta diálogos, sino que actúa como guía orgánica. Durante los combates, analizará automáticamente a los enemigos y registrará sus debilidades en su crónica, ofreciendo pistas en tiempo real (por ejemplo: "¡Sus escudos son vulnerables a ataques pesados!"). Fuera de la batalla, descifrará lenguajes antiguos para desvelar secretos de mazmorras o acceder a áreas ocultas. Este diseño recuerda a personajes como Atreus en God of War, pero con un enfoque más metódico: Adso no ataca, sino que os empodera mediante el conocimiento, reforzando la idea de que Blades of Fire premia la inteligencia sobre la fuerza bruta.
La reina Nerea no os enviará simples esbirros. Con más de 50 tipos de enemigos, desde soldados con armaduras adaptativas hasta no-muertos que regeneran miembros, cada encuentro exigirá ajustar tácticas. Los Guerreros de Obsidiana, por ejemplo, son inmunes a cortes pero lentos, ideal para armas perforantes; los Espectros Umbrales, en cambio, evaden ataques frontales, requiriendo emboscadas. Este desafío se extiende a los escenarios: castillos con pasadizos secretos, palacios con trampas mecánicas y bosques donde la vegetación afecta la visibilidad. MercurySteam ha confirmado que el 40% del contenido será opcional, incluyendo jefes secundarios y misiones que profundizan en el lore del metal divino.
Blades of Fire llegará el 22 de mayo de 2025 a PlayStation 5, Xbox Series X/S y PC (mediante Epic Games Store) con un precio de 59.99 € en consolas y 49.99 € en PC. Las reservas ya están disponibles e incluirán bonus de precompra, aunque 505 Games no ha detallado aún en qué consistirán. Con su mezcla de personalización profunda y combate estratégico, este título aspira a convertirse en un referente para los amantes del género.
