A finales de 1996, Natsume le daba una vuelta de tuerca al género de la estrategia/gestión creando la saga
Harvest Moon, en la que nos ponía al frente de una granja como un joven
granjerito aprendiz que tenía que hacerse con los secretos del campo, aprender cómo sacarle jugo a las cosechas y criar animales. A pesar de su aspecto divertido y colorista el juego tenía una gran profundidad, y algunos aspectos absolutamente sorprendentes, como la posibilidad de ligar con las chicas de la aldea y formar una familia (o que nuestra mujer nos dejara si no le hacíamos suficiente caso). Esto ayudaba a paliar su mecánica repetitiva, y hacía muy rejugable la larguísima aventura...
Ahora, en Wii U podemos revivir el clásico con la opción de grabar cuando queramos, lo que unido a la posibilidad de jugar "off-tv" (en el mando) hacen mucho más sencillo disfrutar del clásico, que ha ido mejorando en sucesivas entregas (especialmente a nivel jugable, en esta entrega sólo podíamos llevar 2 herramientas y un objeto simultáneamente), pero siempre fiel a su identidad. Quizá el punto más complejo para pasar por alto sea la falta de traducción...