Don't Starve: Consola Edition - Análisis PS4

Los usuarios de PS4 tienen este mes de enero de 2014 otro nuevo juego gratuito gracias a PlayStation Plus de nombre Don't Starve: Consola Edition, edición para PS4 del juego de PC aparecido en Steam a mediados de 2013, y hay que decir que es uno de esos juegos 'raros' cuyo original planteamiento hace pensar que estamos ante una joya, pero que al final se queda en mucho menos.

Básicamente, el objetivo del jugador en Don't Starve: Console Edition es sobrevivir a los peligros del escenario. Controlamos a un personaje (se desbloquean nuevos a medida que jugamos) con el analógico izquierdo que puede observar lo que tiene a su alrededor y recoger los objetos que se va encontrando, y con dichos objetos puede crear herramientas que le permiten hacer otras cosas, como un hacha que nos permite talar árboles y así tener madera. Cada uno de estos objetos que podremos construir necesita un número de otros objetos, con lo que el objetivo es ir recolectando para tener más herramientas y poder construir más cosas.

Mientras esto ocurre tendremos que tener en cuenta unas series de circunstancias, como que va pasando el tiempo y cuando se hace de noche los peligros se multiplican hasta el punto de poder morir de forma muy fácil a menos que tengamos fuego (una antorcha o una hoguera), cosas para los que también necesitamos objetos que debemos buscar. Otros detalles (importantes) a tener en cuenta son el tener que comer para no morir de hambre (de ahí el nombre del juego) o intentar no pasar miedo acercándonos mucho a los monstruos (o estar mucho tiempo a oscuras sin morir) ya que tenemos otro indicador que mide nuestra salud mental. Estos indicadores se encuentran en la zona superior derecha de la pantalla (al igual que el del paso del tiempo) y tendremos que vigilarlos constantemente.

Éste es, básicamente, el desarrollo de Don't Starve, y gracias al cual tendremos un rato de juego de mucha tensión en todo momento al tener que estar pendiente de todos estos factores mientras estamos buscando objetos y construyendo nuestro campamento para poder sobrevivir. El problema principal que nos encontramos en la falta de información en todo momento a la hora de hacer cualquier cosa. Por ejemplo, la primera partida que echemos es (casi) una muerta asegurada en los primeros minutos ya que se hace de noche y no sabemos qué debemos hacer hasta ese momento, y cuando nos damos cuenta de que no se ve nada (literalmente) y morimos por el supuesto ataque de un monstruo (no lo vemos al estar tan oscuro). Es ahí cuando averiguamos que tenemos que crear luz para no morir. Pues así es con todo.

Esto hace que la experimentación sea la base de toda la jugabilidad, lo cual es bueno y nos encanta, pero también hará que estemos perdidos durante muchos momentos, lo que puede hacer que nos cansemos y/o aburramos. Otro factor que puede conseguir esto mismo es el hecho de que los escenarios son demasiado monótonos. Un terreno dibujado a mano plano con una serie de árboles y arbustos, un par de pierdas y otro par de pájaros es lo que encontraremos en prácticamente cualquier sitio, sustituyendo los árboles por tumbas en el caso de un cementerio o un acantilado en el caso de la playa. Artísticamente es muy bonito al parecer dibujos pintados a mano, pero esto es así cuando miramos los elementos de forma individual. Si miramos cualquier pantalla del juego o el vídeo nos daremos cuenta que Don't Starve: Console Edition está vacío y muy monótono, algo que también acaba cansando y aburriendo a la larga.

En definitiva, Don't Starve es un juego con un planteamiento muy original, muy 'indie', y que tendrá a buen seguro su buena legión de seguidores, pero al que se le echa en falta un tutorial inicial que nos explique qué debemos hacer y unos objetivos claros, además del propio de sobrevivir y no morir de hambre o al ser atacado por una criatura extraña. También necesitaría una traducción al español (los textos no son precisamente fáciles y puede hacer que se pierdan mucho de lo que hacer) y una mayor variación en entornos (hacerlos más vistosos tampoco estaría nada mal).

Esta es la clase de juego que puedes odiar o amar dependiendo de la clase de jugador que seas. En mi caso particular, las primeras partidas me aburrió profundamente por no saber qué hacer ni cómo, pero a medida que se le coge el tranquillo acaba gustando un poco más. Aún así, unos entornos más elaborados y una mayor variación en los mismos, además de un pequeño tutorial harían que enganchase más, además de que sabríamos cual es el objetivo final.

Uno de los problemas que tiene Don't Starve es su curva de dificultad. Aunque parece realmente sencillo de jugar (casi todo se hace pulsando el botón X del mando), el encontrarnos en un paraje inhóspito con ninguna herramienta a nuestro alrededor y ni la más remota idea de qué hacer convierten el juego en una odisea en sus primeros minutos. A medida que vamos experimentando vamos aprendiendo el qué y el cómo hacerlo y después resulta muy sencillo. El que en cada partida se generen aleatoriamente los escenarios hace que tengamos juego para rato. No tenemos cooperativo ni multi de ninguna clase. El estar en inglés también puede complicar un poco su desarrollo.

No existe nada parecido en el mercado. Es la combinación de varios estilos de juego que sí hemos visto, sobre todo en juegos indie pero no en los comerciales. Tendremos que buscar alimento para no morir de hambre y mientras recolectar objetos y materiales para hacer armas y un refugio y al mismo tiempo tenemos que estar pendiente de cuando se hace de noche que los peligros se multiplican. Todo esto aderezado con un apartado gráfico muy original y fresco.

Analizando el apartado artístico, es un juego que parece pintado a mano con rotuladores, lo cual es original y fresco. Eso sí, una vez pasadas las animaciones iniciales vemos que aparte del personaje principal, los escenarios están muy vacíos y están poco detallados y prácticamente lo que vemos es un campo marrón y verde y un agua azul casi negra. Otros escenarios como el cementerio o cualquier otro entorno (incluyendo el otro universo al otro lado del agujero) tiene un aspecto demasiado parecidos entre sí. La música es casi inexistente y lo que hay es muy ambiental y el no estar traducido o doblado complica su desarrollo.