En la primera toma de contacto con
Bayonetta la mecánica de juego - basada en combos de dos botones, ataques con brazos y piernas - puede parecer un poco simplona... Pero nada más lejos de la realidad. La acción empieza a enriquecerse
a los pocos minutos de juego con el
Tiempo Brujo, un original tipo de esquive que ralentiza la acción y
que es uno de los elementos más originales e innovadores de la mecánica jugable junto a la opción de luchar en vertical mientras corremos por las paredes.
El planteamiento de Bayonetta es como el
de una brillante película de acción que no deja que el jugador se acomode en el asiento y lo sorprende en cada nueva escena. Al comenzar a jugar vamos a encontrarnos un enorme árbol de combos, y cuando empecemos a acostumbrarnos comienzan a llegar las armas alternativas, las transformaciones del personaje, la moto... A cada escena vibrante le sucede otra más emocionante y espectacular, cada combate final se queda pequeño con los consecuentes. En líneas generales no hay puntos flojos (salvo quizá el capítulo 14, que simplemente tiene más puzzles y enigmas) y la propia acción nos empuja a seguir descubriendo con muchísimo interés
qué nos espera en el siguiente nivel.
La magia ayuda a perfilar todavía más esta fórmula, y es que
los hechizos especiales son, a grandes ragos, impresionantes ejecuciones especiales que nos dejarán boquiabiertos. Y la invocación de nuestras
mascotas para acabar con los enemigos suele ser el broche final de los momentos más espectaculares del juego. La variedad de los enemigos es
sólo una de las pruebas del enorme trabajo de Platinum Games, que no sólo ha creado a un personaje inolvidable y un riquísimo mundo, también
aportan muchísimo para que el jugador pueda meterse de lleno en él. Por una parte tenemos una tienda
podéis leer los detalles aquí con mejoras que nos ayudan a adaptar la jugabilidad del título, y por otro lado
vamos a encontrar un colosal trabajo de guionización: diarios de personajes, elementos mitológicos y del folclore... Incluso algún que otro guiño a otras sagas de la antigua
Clover.
La experiencia
Bayonetta es, desde cualquier punto de vista, única en el género. A nivel jugable - a todo lo dicho anteriormente hay que sumar la inclusión
de un modo muy fácil que se controla con sólo dos botones -, en el apartado artístico, en el planteamiento... Vamos a ser malos (sólo un poquito), y vamos a disfrutar como nunca siéndolo: provocando a los ángeles, torturando a nuestros enemigos o vacilándole a las altas esferas del cielo y el infierno. Y todo con muchísimo estilo.
En el apartado técnico
vamos a encontrarnos un título tan impresionante a nivel artístico y con un desarrollo tan efectista y alucinante que es fácil perdonarle sus - mínimos - fallitos, alguna ralentización puntual y momentos un poco menos brillantes. Estos puntos por pulir apenas consiguen desmerecer el conjunto global,
que se enriquece con una banda sonora única y unas voces - en inglés - elegidas a la perfección. El título nos llega perfectamente subtitulado al castellano (y es obligatorio, ya que los ángeles son inteligibles en cualquier idioma)
Ya para terminar, tenemos que recalcar la diferencia entre versiones. Si bien es cierto que el
port de
SEGA para
Playstation 3 del título original de
Xbox 360 es en sí misma un excelente juego, a los jugadores multiplataforma más puristas
hay que recomendarles - sin dudas - la versión para la consola de Microsoft, más fluida y sólida en
framerate y, curiosamente, con menos cargas.