Los jugones más veteranos quizá recuerden un
mágico título de
Playstation llamado
Tail Concerto, una aventura única en un mundo sobre las nubes poblado de perros y gatos con rasgos de persona, en el que controlábamos a un
perrito y su robot... Antes de alcanzar su brutal popularidad con las distintas adaptaciones de
Naruto, esta la primera
obra maestra de
Cyberconnect2, ayudados por
Nobuteru Yuki (
Escaflowne).
Solatorobo: Red The Hunter nos propone volver a este mundo (completamente accesible para nuevos jugadores, cálido y lleno de guiños para los que ya jugamos) y meternos en la piel de
Red, un chulesco
Caninu (hombre-perro) que se gana la vida como cazarrecompensas. En mitad de una misión se hará con un misterioso colgante... Y comenzaremos a descubrir los increíbles secretos de este mundo que flota en el aire.
Solatorobo mezcla 3 dinámicas de juego claramente diferenciables:
- El sistema de combate se basa un poco en la
lucha libre. Para hacer daño a nuestros rivales lo mejor es lanzarlos (o coger algo del escenario y tirarlo hacia ellos para debilitarlos). Mientras más mejoremos nuestro robot, más fácil será cogerlos (al igual que si los sorprendemos por detrás). Conforme avanza la aventura vamos aprendiendo distintos tipos de combo que nos harán más letales, e incluso podremos conseguir nuevas habilidades.
- La exploración. La aventura de
Red está llena de misiones secundarias (casi un centenar) y distintas mazmorras a explorar, con monstruos y puzles. Para superar muchos de los puzles tendremos que bajar del robot para explorar, nadar, colgarnos, balancearnos... Conforme avancemos en la trama iremos consiguiendo nuevos tipos de
mecha con otras habilidades (como un gancho), así que siempre hay sorpresas y no se estanca la mecánica de juego.
- El vuelo. Con nuestro robot-aeronave podremos volar en distintos circuitos para cumplir distintos desafíos; el control es muy intuitivo, y la idea es aprovechar nuestro medidor de turbo y las originales armas de
Red para vencer a los enemigos. Aunque estas fases no son tan comunes como las de acción sobre el robot, suponen un soplo de aire fresco.
Terminar la aventura de
Red en nuestra primera partida nos llevará unas 12-15 horas (más o menos dependiendo de lo completistas que seamos: hay fotos que encontrar, cuadros que comprar, música para componer y coleccionar...), pero esto es sólo la
mitad del juego. Por una parte tenemos una especie de
Game + con una importante diferencia jugable - no podemos entrar en detalles para no arruinaros la trama - y un monstruo final distinto. Por otra se ha implementado un
modo de carreras rápidas de aeronaves con opciones multijugador; tenemos varios circuitos y tipos de naves distintos, y podemos correr al estilo
Mario Kart. Un punto interesante es que
siempre conseguiremos recompensa, anillos que luego se pasan al modo historia.
Nintendo Europa ha puesto toda la carne en el asador, y además de lanzar el juego
con textos en castellano (y algunas vocecillas en francés, lo que nos hace pensar que el juego iba a ser doblado... Aunque termina siendo un detalle que le da personalidad) también ha traducido las misiones descargables del título original japonés, otro extra muy de agradecer.
Por último, la única pega que podemos ponerle al título no es realmente suya; es haber intentado llevar demasiado lejos
Nintendo DS... Hay zonas en las que si se unen demasiados personajes cuesta reconocerlos por problemas de resolución, y el genial trabajo de diseñadores y grafistas no luce tanto como debiera (al tiempo que la pantalla táctil de la consola no tiene peso en el juego). Al igual que
Okamiden, hablamos de un título que probablemente hubiera quedado mucho más lucido en
3DS; eso sí, su calidad en la veterana portátil de
Nintendo es sobresaliente.